Voy por una carretera secundaria con muy poco tráfico, cuando de pronto veo algo en el suelo...parece una, una ¿gallina?, sí, es una gallina. Está empapada y quieta en el asfalto pero viva...umm, que raro.
Paso de largo esquivándola hasta que unos metros más adelante pienso: "está anocheciendo, el próximo coche no la va a ver y la atropellará, tengo que hacer algo, tengo que hacer algo...", así es que decido dar media vuelta y volver a por ella.
Llego justo a tiempo, paro el coche delante de ella, me bajo y..."¿como la cojo?, seguro que en cuanto me acerque sale corriendo, además seguro que me pica". Rebusco en el maletero por si tuviera la típica manta, que todo el mundo suele llevar...nada, ni manta ni sábana ni nada parecido.
Decido enfrentarme a ella por las bravas, me acerco sigilosa por su espalda y.....zas!,¡la tengo!, ¡la he salvado!, está completamente empapada pero no tiene ni sangre ni nada roto, y cacarea y cacarea sin parar, además el corazón le va a mil por hora...pobrecita, que susto tiene encima, se creerá que la voy a matar...y pienso: "¿y ahora que narices hago con ella?". No sé, ni idea, el caso es que la he salvado así es que ya se me ocurrirá algo.
La meto en el maletero y continúo mi viaje a casa, cuando de repente, me acuerdo que cerca de casa hay una granja de gallinas de la empresa DAGU...allí voy!.
Llego a la puerta y está todo cerrado, solo hay un telefonillo, llamo a ver si me abren y mientras pienso en lo cómico de la situación, surrealista total...."¡a ver como le explico yo a quien me atienda por el telefonillo lo que me ha pasado y lo que tengo en el maletero!".
Suena una voz al otro lado:
-¿Si, quien es?
-Yo: "Buenas tardes, mira no te vas a creer lo que te voy a contar, pero viniendo por la carretera me he encontrado una gallina, tirada, la iban a atropellar...total que la he recogido y la tengo en el maletero del coche...y he pensado que a lo mejor os la podíais quedar..."
-Si, seguramente sea nuestra que nos la hayan robado y se les haya escapado en el trayecto. Pásala por encima de la verja, que luego la recogemos".
-Yo: "ah...estupendo..pues muchas gracias. Adiós".
Abrí el maletero, la gallina ya se había acoplado entre las mil cosas inservibles que una suele llevar en él, me miró asustada, seguramente pensando "ya es mi hora, ahora me corta el cuello", pero no, la cogí, ella continuó con su cacareo habitual , y la solté por la verja.
Ahí se quedó mirándome como me iba.
Siento no tener fotos, no llevaba la cámara encima y no caí ni siquiera en sacar una foto con el móvil, el único vestigio de su presencia fue el maletero lleno de barro con pisadas de gallina.
Cuando llegué a casa y se lo conté a Serafín, casi ni se lo creía. Pobrecita gallina, luego pensé que a lo mejor trastoqué sus planes de huída, tipo Chicken run...¿que habrá sido de ella?.
La gallina creada por Eva (mi sobrina) |
Sinceramente, me hubiese encantado ver un final feliz.
ResponderEliminarHiciste bien en rescatarla, pero luego la volviste a condenar.
Lo suyo hubiese sido buscar un santuario de animales que la diese una buena vida, no una granja donde la explotarán, maltratarán, y asesinarán.
Hola Pablosky.
EliminarAsí es. Es contradictorio, sacarla de la carretera para devolverla a un destino fatal. No sabemos de santuarios de animales para animales de granja. Hemos llevado en varias ocasiones animales silvestres a GREFA pero en ese caso no vimos otras opciones.
Saludos.